inhibidores de corrosión orgánicos. Su fórmula exclusiva, completamente exenta de fosfatos, aminas, nitritos, boro, silicatos, nitratos,
prolonga la vida útil de los materiales del circuito de refrigeración y a la vez del propio fluido, confiriendo un óptimo enfriamiento al
motor. Contribuye a la protección del medioambiente por su fórmula y su característica de “larga vida”.
maquinaria agrícola y motores estacionarios industriales y a gas de cualquier tamaño.
• Se recomienda su uso en dilución con un agua de baja dureza/ desionizada, y constituye un
líquido permanente utilizable todo el año.
• Antes de proceder al llenado de un circuito que contiene un producto diferente es necesario
efectuar un enjuague para no alterar las propiedades del producto.
• Es indispensable mezclar mecánicamente el producto con agua para asegurar una mezcla
perfecta.
• Se recomienda utilizar la dilución recomendada por el fabricante del vehículo y seguir las
instrucciones del manual de usuario del mismo.
• Se recomienda que al menos el 33% de la mezcla final esté constituido por GLACELF SUPRA.
• Es completamente seguro para el uso en motores de fundición de hierro o aluminio, y en
radiadores/ sistemas de enfriamiento que contengan aleaciones de aluminio o cobre.
• Como todo líquido refrigerante – anticongelante a base de monoetilenglicol, deben seguirse las
disposiciones locales vigentes en materia de disposición y tratamiento.
• GLACELF SUPRA se emplea diluido en agua. La protección contra el congelamiento dependede la proporción.
• Gracias a su aditivación orgánica específica, GLACELF SUPRA asegura una protección contra la
cavitación muy superior a la que proporcionan los anticongelantes clásicos. Brinda una protección
anticorrosivo superior, particularmente en lo que concierne a las aleaciones de aluminio.
• La excepcional estabilidad térmica de GLACELF SUPRA evita la formación de depósitos
minerales duros, particularmente cerca de la parte superior de camisas, culatas, tubos
intercambiadores de calor y resistencias de calefacción, asegurando asimismo:
✓ el cuidado del intercambio térmico,
✓ el mantenimiento de las propiedades del fluido,
✓ la disminución de los riesgos de erosión de conductos debido a partículas duras en circulación,
✓ la limpieza del circuito.
• La característica de «larga duración» del fluido permite reducir los costos de eliminación,
mediante la prologación del tiempo de uso de cada carga y la reducción de la frecuencia de
cambios.